Hola a tod@s: este puente y durante los días 4, 5 y 6 he tenido la suerte, de poder realizar uno de los tramos -a mi juicio- más bonitos de la Ruta de la Plata (Sevilla-Santiago), en concreto el comprendido entre la localidad de Carcaboso y Salamanca. De este modo / manera así quise celebrar el día Mundial del Medio Ambiente (5 Junio), aún sabiendo que a la gran mayoría de los mortales, este aspecto -el del Medio Ambiente- ni le va, ni le viene.
Para llegar desde Madrid hasta allí, utilicé el tren de Media Distancia hasta Plasencia y para el regreso también, desde Salamanca.
El primer día hice la etapa comprendida entre Carcaboso y Aldeanueva del Camino (50 km) recorriendo la preciosa dehesa extremeña a través de un espectacular sendero, en el que tienes que ir abriendo y cerrando cancelas para el ganado; con el impresionante Arco de Caparra y el yacimiento romano como aliciente. Durante todo el trayecto, no tuve contacto con ningún ser vivo perteneciente a la especie humana (ni siquiera de la variedad Pilgrim), hasta la pernocta, que la pasé en uno de los campings cercanos a Hervás.
La segunda jornada, entre Aldeanueva del Camino y Fuenterroble de Salvatierra (55,6 km) estuvo jalonada por las visitas a las poblaciones de Hervás (impresionante el barrio judío), Baños de Montemayor y Béjar; localidades pertenecientes al Valle del Ambroz, hinchándome a comer cerezas por todo el camino.
Comentar que es perfectamente factible circular tranquilamente por la N-630 y subir así el Puerto de Béjar,- evitando la incómoda a mi juicio calzada romana- puesto que es una de esas carreteras que se ha quedado apenas sin tráfico para automóviles, debido a que el grueso de éste se desvía por la autopista paralela, quedando de este modo ésta carretera como un paraíso para los cicloturistas.
Como observación curiosa, es de destacar el inusitado interés que despierta (sobre todo institucional) la iniciativa empeño por el desmantelamiento del tramo de vía perteneciente al ferrocarril Via de la Plata, que por aquí transcurre y que fue cerrada en 1985, en un intento para convertirla en otra aburrida via verde. Una nueva "venta de humo" que sin duda contará con muchos adeptos:
http://valleambroz.org/inicio/
Desde Béjar conté con la compañía de un cicloturista croata: Ronbir, estudiante de literatura, que había salido de Lisboa y que pretendiendo hacer escala en Polonia, quiere después continuar hasta Grecia; según me relató en idioma inglés, en el transcurso del caluroso día.
Para el segunda pernocta, decidí dormir en el albergue de Peregrinos de Fuenterroble, una mala opción, no por las instalaciones que estaban muy bien, sino por los consabidos ronquidos del personal circulante en la habitación para ciclistas. Menos mal que a media noche tiré de almohada y saco, y huí en búsqueda de un más tranquilo refugio, en una cabaña próxima.
El tercer tramo, desde Fuenterroble a Salamanca (52,2 km) me sorprendió favorablemente, porque a pesar del cambio ya de paisaje, se mantiene en el trayecto una secuencia de pueblos -Pedrosillo de los Aires- Monterrubio de la Sierra - Morille, pertenecientes a la Mancomunidad de Sta. Teresa, muy bien cuidados, y que bien merecen la pena visitar.
Ha quedado emplazada pues, en Salamanca, la continuidad de ésta gran ruta, que sin duda, no dejará a nadie de sorprender.