El viaje en compañía, sobre todo si sabes que se apunta al viaje para estar contigo o porque a ti te hace ilusión, me plantea el problema de la comodidad y disfrute de mi compañera. Cuando viajaba en moto con mi esposa, q.e.d., ya me pasaba, mi prioridad era su comodidad, con lo que yo me perdía mi propio placer al viajar. Con la moto no me importaba salir de Castellón después de comer y dormir en Irún, si iba sólo, me lo pasaba pipa, no me preocupaba más que de la moto, la gasolina, las curvas y mis cortaditos. En compañía estaba la comodidad de mi señora y todo lo mío pasaba a un segundo plano. En bici lo mismo, si voy sólo o con la compañía de algún forero, que ya me conozco a unos cuantos, el otro/a sabe a lo que va y no me preocupo más que lo necesario, en cambio si he invitado a alguien que no está muy ducho en la bici y viene sólo por estar conmigo, me preocupa su comodidad, el ritmo, las paradas, etc.
Resumiendo, como mejor se viaja es acompañado de foreros/as que saben lo que hay y no hay que explicarles nada, ni lo de la comida, lo del agua, lo de las paradas, lo de las cuestas, lo del cigarrito liao a la sombra, eh Vicent?. De hecho, he impulsado una collita de gente aquí en Castellón y nos hemos hecho buenos amigos para salir con la bici, charlamos, nos reímos y nos cansamos de pedalear lo justo, que tampòco vamos a padecer más de lo necesario.
Esta primavera espero que hagamos otra salida de dos o tres días que son una buena terapia para el cuerpo y la mente.
Dios creó la cerveza, el diablo la Coca-Cola.