Hoy llueve pero aprovechando el festivo me apetecía salir un rato.
Como el clima no acompaña (aunque no llega a ser incómodo, el típico orballo gallego) cambio el modo Cx por el modo gravel. Abandono los caminos conocidos por los que vas casi de memoria y sin alejarme mucho de casa voy buscando carreteras secundarias y senderos nuevos.
Hoy sí que había barro de verdad. En varias ocasiones tuve que desmontar y portear la bici. Por suerte es ultra-light
Me extrañó no ver ningún gnomo, trasgo, hada o bicho similar por aquí
Esto es un singletrack como una casa. Tendré que venir un día con la Marin
Más terreno fácil, rodador. Los G-One se comportaron muy bien, ejem
¿Sabéis esa sensación de salir sin prisa y perderse por caminos nuevos, sin saber qué vas a encontrar? Claro que la conocéis.
Saludos