Señores y señoras...
Habemus Croozer.
Finalmente (y como por ahora tenemos sitio en casa) nos decantamos por el remolque. Es cierto que es aparatoso y que es un fastidio tener que preparar el carro, saca ruedas, la lanza, plegarlo, meterlo en el coche... etc. Es más trabajo para organizarse en comparación con la sillita trasera para la bici, pero una vez en el camino va de lujo.
Lo encontré por Wallapop, y aunque se le nota que tiene uso, espero que me dure unos cuantos años y poder sacarle partido. Hoy hemos salido a probar durante una horita por el llobregat para ver las sensaciones y acostrumbrarnos al nuevo cacharro.
Al empezar he tenido la sensación de que es muy ancho y eso te obliga a llevar en mente la distancia lateral, cosa que yendo solo o con sillita, no cambia tanto; pero me ha sorprendido lo fácil que se va con él. Yo me esperaba algo más de lastre, como la primera vez que cargué las alforjas.
Este modelo es el básico, no lleva amortiguación, y al ser el primer día, tanto para el peque como para mi mujer (desde el embarazo) hemos rodado muy despacio. ¡El niño ni una queja oiga!
A los 10 minutos se ha dormido al solecito de invierno y se ha despertado cuando faltaban cinco metros para llegar al coche de vuelta.
Así que una gozada la primera toma de contacto.
La intención es, poco a poco, alargar los recorridos para acostumbrarnos a la nueva logística que todo esto implica.
A ver si finalmente consigo animar a la familia para hacer la Via del Garona

:lol:
Adjunto
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