Por fin llega el momento deseado: después de muchos planes, este lunes cogeré un autobús con destino Mérida para empezar allí la Vía de la Plata hasta mi casa, en Xixón. Comienzo con mucha ilusión y ganas, con una preparación razonable (conocimiento de la ruta) y con cierto miedo al calor. Si todo sale como está previsto, serán ocho días de ruta; si no, pues no pasa nada, que ya se sabe que en un viaje en bici siempre hay lugar para los imprevistos.
Aunque a muchos, acostumbrados a grandes viajes, os parecerá un paseo alrededor de casa, para mí es una ocasión especial: hace ya 14 años de mi último viaje en bici (un Camino de Santiago), y espero que este sea solo el inicio de una serie. Además, este año he cumplido una cifra redonda (50) y he resuelto definitivamente mi futuro laboral, motivos todos ellos suficientes para disfrutar de unos días a ritmo de pedalada.
Espero poder contaros mis impresiones a la vuelta y compartir con vosotros esta afición a la que contribuís desde el foro. Saludos.
), pero tradicionalmente la tensión se me acumula en el cuello y trapecios.