Soy nuevo én esto de la bicicleta, pero este verano me he ido aficionando poco a poco a esto de dar grandes paseos en ella, e ir disfrutando del entorno y su paisaje. Unas experiencias bastante satisfactorias mental y espiritualmente.
También he comprendido el coste y sacrificio físico, por lo que estoy intentando desengrasar este cincuentenario cuerpo un poco castigado.
En referencia a la máquina, solo deciros que la voy adaptando poco a poco a las necesidades q me van surgiendo.
Bueno gracias por vuestra atención.