¡¡¡NOS PONEMOS EN MARCHAAAAAAAAAAAAAAA¡¡¡
Joer, ¡cuanto me ha costado explicarle e L lo de esta rutilla¡¡.. L se ha montado en la bici y esperaba estar en Cordoba, pero salimos de Jaén en dirección Linares, la tierra del tito Yelmo. Ha pegado un salto de la bici y se ha puesto a berrear como un reno, como lo que es. ¡Que no!, ¡que nó!
...que por aquí no es.....
A ver L, no es tan dificil..... Aprovechando que estas en Jaén, hemos hecho alguna avanzadilla del relevo entre Jaén y Albacete.
¡¡¡Que sí, leches, que sí!!!, y dale con el reno, es mas testarudo que una mula. Bueno, aunque te cueste entenderlo, lo hemos hecho.
Estas fueron las vicisitudes que tube este finde con L. Ahora parece que está mas tranqilo. pero....¡¡¡me ha costado!!!
Os explico a vosotros, que algunos y algunas habeis puesto una cara que ni L.....
Pues eso, que aprovechando que L pernocta en Jaén, en espera del sabado día 3 que haremos el relevo entre Jaén y Cordoba, hemos hecho unas avanzadillas del relevo entre Jaén y Albacete. Se trata de ir adelantando trabajo (que no camino) ya que como os adelanté anteriormente, este relevo iba a tener un doble sentido. El de participar en La Espiral y el de descubrir, deslindar, clasificar, y en definitiva, poner en valor el trazado del Antiguo FF.CC. Baeza-Utiel. Ya os he mandado algún temilla para vuestra información y para saciar vuestra curiosidad. Ahora os mando un documentillo que he redactado, que para mi supone una especie de declaración de intenciones o mas bien, de motivaciones.
A MODO DE INTRODUCCIÓN Y SIN ÁNIMO DE SER NOSTALGICO: A cerca de cómo se fragua
un proyecto basado en un sueño y movido por una ilusión.
A veces los sueños se cumplen. Es necesario desearlos mucho, pero por mucho que lo desees no es
suficiente. Hay que ponerles gran cantidad de cariño, de ilusión y así, las
grandes dosis de deseo pueden hacer su función, moviendo los hilos para que las
cosas ocurran. Y los deseos se cumplirán, ¡seguro!
Allá por los años 69, 70 y 71, el ir y venir a Valencia era un continuo trasiego. Los tres cursos que
estudié del Bachiller Elemental en la Universidad Laboral de Cheste, fueron
para mí el despertar a otros mundos, a otras cosas y a otras formas de entender
la vida. Además de mi pueblo, Mengíbar, existían otras cosas, otros mundos,
otras formas de hablar y de entender lo que ocurría; otra forma de ver a
Franco, y otra forma de hablarles a los maestros. Entendí el respeto desde
otras perspectivas. (Qué rollo, pero qué bonito).
Desde los autobuses de “La Paloma Gandiense” se podía ver un paisaje agreste, estepario, rojo y con
grandes ondulaciones del terreno. Inmensas laderas de olivar. Barbechos y
estepa. Retamas y tierras rojizas. Tras esto, el mareo. El bocadillo que me
comía en Villanueva del Arzobispo, que era el que más me gustaba, de tortilla
de jamón, iba directamente a la bolsa que el conductor nos proporcionaba. Desde
las curvas de El Jardín, mi estómago ya no era mío hasta que no pasaban dos
días, y máximo cuando llegábamos a la Universidad Laboral y nos ponían de cenar
esas sopas tan extrañas: cebollitas, patatas y judías verdes (he de confesar
que a la postre fue mi preferida, a pesar de que en general era la que menos
gustaba).
Mi amigo Carmelo Usero es de Villanueva del Arzobispo y fue el que me explicó que pronto iríamos en tren a
Valencia, porque una vía que estaba recién construida y que se había detenido
por “no sé qué cosas”, ya se iba a poner en funcionamiento. En Alcaráz, donde
recogíamos a mi otro gran amigo, Juan Ramón Esteban, “el jefe”, habían oído
también este asunto. Decía que los vecinos de su pueblo esperaban este F.C.
para “desarrollar” sus vidas y sus economías. Decían que por allí pasaría mucha
gente, muchas mercancías y que estos trenes traerían el progreso y la riqueza a
su pueblo, y a los míseros pueblos de los alrededores. Las vías estaban ahí, las estaciones,
ultramodernas, estaban ahí. Pasábamos por ellas y yo las veía tan diferentes a
las de mi pueblo; ya empezaba a comprender los conceptos de modernidad.
Pasaron los tres años de mi vida en Cheste y todo seguía igual, los autobuses Setra Seida de culo recortado
de la “Paloma Gandiense” seguían siendo nuestro transporte a Cheste. En todos
esos años, seguí viendo las vías del tren sin uso, las estaciones sin habitar.
Los puentes y viaductos tan esbeltos, tan altivos y tan estériles. Pasaron
otras decenas de años y todo seguía igual. Ha pasado ya medio siglo y todo
sigue igual. La comarca del Condado, de la Loma, de la Sierra de Alcaráz, de
los Llanos, de Albacete. Los pueblos de esta línea continúan manteniendo una economía de subsistencia, dependiendo del
olivar y de las subvenciones. De la errática agricultura y de su caprichosa
comercialización. De las ayudas institucionales. Y sobre todo, los pueblos
manchegos, luchando día a día contra la desertización, contra el abandono y
contra el olvido.
Así fue como conocí el F.C. Baeza Utiel. Desde que yo tenía 12 años he conocido este proyecto, pero yo lo
conocí desde las expectativas que se les crearon a unas gentes y a unos pueblos
que lo necesitaban que, realmente lo necesitaban. Que, hoy día lo siguen
necesitando.
Ahora, en el año 2012 leo la historia de ese ferrocarril, me ennervio, me rebelo y me pregunto muchas cosas.
Todas sin respuesta, pero todas las
respuestas son indignantes, anacrónicas y carentes de sentido común.
El trazado sigue allí. Vigente. Como ninguna de las estructuras construidas recientemente. Su
personalidad nos dice que fue construida para durar mucho tiempo. Túneles y
viaductos siguen en pié y en perfecto estado. Las inclemencias del tiempo y el
mismo tiempo en sí no han deteriorado, ni en lo más mínimo, su estructura
original; solo la pérfida mano del hombre, la desidia y el olvido les han hecho
alguna mella. Si comparamos esta construcción, que costó 55 millones de pesetas, con lo que hoy se hace,
construye o diseña, la diferencia es abismal.
Ahora, esta será una humilde aportación a este proyecto que tanto tiempo he tenido en mente. Que
a lo largo de mi vida ha ido royendo mi curiosidad. Podría no haber quedado estéril
el trabajo y esfuerzo de tanta gente de aquellos años. Ponerla en valor no es
nada costoso. Las infraestructuras básicas están ahí. El ejemplo de la
Diputación de Albacete debe prevalecer en todo el trazado. Pero la puta crisis
y los putos recortes, creo que pasarán a un plano más que terciario este fantástico
proyecto. Mientras tanto, realizaremos un laborioso trabajo para que quien la
quiera usar como camino natural, pueda hacerlo.
Saludos
Andrés