Yo uso y me fío bastante de las Apps meteorológicas. La mayoría son francamente buenas y pronostican con enorme acierto incluso por horas. En viajes, sobre todo por zonas que no conozco, me parecen la herramienta ideal.
Con el tiempo y los viajes en bici (o los paseos por el monte y estancias al aire libre) algo se va aprendiendo también casi sin querer, pero ahí ya sólo soy capaz de predecir lo que es muy inminente, lo que prácticamente todo el mundo es capaz de ver. Se identificar las nubes que traen agua y diferenciarlas de las que no (al menos en las zonas en las que me muevo más habitualmente). Ese dato junto con el viento, su dirección y su intensidad, me permiten pronosticar el tiempo pero, como podéis imaginaros, no con mucha antelación, claro.
Alguna vez, nos obstante, eso me ha servido para evitar un chaparrón aumentando la velocidad para llegar a casa o a cubierto.
Saludos.