Lo dicho. Quien escribe se ha dado una vuelta por Ibiza en la que la bici, en este caso mi Brompton, ha compartido protagonismo con otros artilugios y medios que un servidor utiliza para explorar esos mundos. Me explico, ha sido un viaje con mi furgo-camper en la que todo el equipo y equipaje debía ir dentro del habitáculo de 200x150 en cms. `Por lo que además de la cama, caja de útiles de cocina, caja de comida, caja de ropa y wc químico, debía además ubicar un mini-taburete a modo de silla, la bici y un caiac desmontable, un Cubykayak, éste último dormia de noche encima de la baca de la furgo.
Con todo el buque Zurbarán de Transmediterránea me llevaría de noche hasta Ibiza, que me acogió con unas temperaturas realmente bajas, últimos coletazos de la ola de frío que también barrió la isla dejando un ambiente gélido y húmedo por las lluvias torrenciales caídas los días anteriores. A las 9 de la mañana a 4 grados centígrados, brrrr empezamos bien!.
De cualquier modo, Ibiza está preciosa, gélida y luminosa, casi desprovista de turistas, con cara de sueño y las prisas de las personas que van a sus quehaceres cotidianos. La esencia mediterránea está por todas partes y empiezo a sentirme el protagonista de una historia que justo acaba de empezar. Bon dia, Eivissa!
El vent a les cames, l´horitzó als ulls, l´aventura al cor...