Agustin_58 dice:
Hedumaza dice: Agustín, supongo que a estas alturas ya le habrán retirado el tornillo a la rueda en el taller, perooo, si por un casual, aún lo llevaras ( deseo que no sea así ), te recomiendo que lleves la rueda ( o mejor lleva el coche
), bien a taller oficial, o bien a un taller de ruedas, a que te reparen esa rueda, pues el tornillo que lleva la rueda, se puede considerar como un objeto extraño para el neumático, por lo que, a la hora de rodar, cuando el neumático pisa sobre el tornillo, éste tiende a moverse, lo que va a ir acrecentando el orificio que le ha provocado al neumático... se si deja tiempo clavado, el aire terminará escapándose por entre el tornillo y el orificio que ha creado, por lo que uno puede llegar a encontrarse la llanta en el suelo... pero ésto es lo menos malo que puede pasar, ya que llevar un objeto, y más si es metálico, clavado en las ruedas, puede terminar provocando el reventón del neumático, por ello, lo mejor es ir cuanto antes a un taller a que reparen la rueda que lleva el tornillo. Eso sí, nunca hay que retirar el objeto clavado a la rueda, pues el mismo objeto, en este caso un tornillo, actúa como tapón, e impedirá que se desinfle el neumático antes de llegar al taller.
Pues aún no he llevado el coche al taller, el tornillo sigue ahí, no pierde presión porque la miro en la pantalla y sigue con la presión normal, 2,4 como en las otras tres ruedas, yo creo que no ha llegado a perforar todo el neumático, así que no lo toco, el caso es que aún me faltan 12.000 km para la primer revisión de mantenimiento que es a los 20.000 km (vaya tela).
Gracias por el consejo
... Yo te diría que no esperes a la revisión, de todas formas, un pinchazo no entra dentro de ninguna revisión de ningún coche... otra cosa sería que te pille muy lejos el taller, pero ten en cuenta que puede ser que el tornillo todavía no haya adquirido movimiento, pues los objetos se clavan a presión, pero te puedo decir que a mi me han cambiado en mi empresa varios camiones solo por llevar un tornillo o un objeto metálico clavado en las ruedas... y los camiones llevan cubiertas con bandas de rodadura mucho más gruesas que los turismos. Si es por pereza, por lo que aún no lo has hecho, piensa que cuando lleves a tu familia en el coche, ese tornillo podría cambiar de parecer, y hacerle pupa a la rueda... y quien sabe lo que podría ocurrir... yo no me fiaría ni un ápice de ese tornillo, y llevaría la rueda a reparar, porque... a lo mejor resulta que no se trata de un tornillo, sino simplemente de la cabeza de éste, que por cosas del destino, se te haya clavado en la rueda, y sí, no haya llegado a perforar del todo el neumático, pero piensa también que si ese tornillo, aunque no haya terminado de perforar del todo el neumático, es muy probable que sí haya dañado alguna que otra capa de las que conforman la estructura del neumático... esas capas son fibras de tela, y cuando se desgarran esas fibras, éstas tienden a ir dañando las aledañas, y quizás por fuera no se vea, pero pudiera ser que por dentro el neumático este tocado.
En una ocasión sufrí un pinchazo en una rueda trasera , en mi anterior coche, en una autovía de circunvalación de Madrid ( M-50 ). Circulaba por el tercer carril, ya que iba adelantando a otros vehículos. El caso es que, debido a la situación en que me encontraba, con tráfico más bien denso, en el tercer carril, y con un tramo de autovía donde la anchura del arcén no invita mucho a detenerse en él con seguridad, decidí seguir rodando hasta encontrar un lugar seguro en el que poder cambiar la rueda.
El caso es que cuando cambié la rueda, el neumático no presentaba daño externo alguno... me resulto algo extraño, pues tuve que rodar durante unos cuantos centenares de metros... y a una velocidad más bien alta para llevar una llanta sobre le neumático pinchado... bajé de 120 o 130 a unos 80 o 90 km/h.
Por la tarde llevé el neumático a reparar ( el pinchazo lo tuve por la mañana ), y al desmontarme el neumático para comprobar su estado, pues cuando les dije lo que me había pasado, quisieron comprobar que el neumático seguía intacto estructuralmente, al desmontar el neumático de la llanta había dentro trozos de caucho de todos los tamaños... había caucho en polvo mezclado con trozos de caucho de muchos tamaños.
El chaval que me desmontó el neumático me pidió que le echara un vistazo al interior del neumático... se verían todas las fibras de tela al aire... el chaval me dijo que ese neumático ya no tenía arreglo... que me lo podía reparar el pinchazo, pero que muy probablemente me terminaría reventando en poco tiempo... era mejor deshacerse de él y poner uno nuevo. Aquel pinchazo me costó poner dos neumáticos nuevos, y el de la rueda contraria a la del pinchazo... a repuesto.