VIERNES, 16 de septiembre de 2016 Sigüenza - Maranchón, 54 bonitos kilómetros y con vivencias francamente buenas. El dia lo empecé desayunando casi com Kepa, un muchacho de Bilbao quqe se hospedaba en el mismo hotel y que también está haciendo la ruta del Cid, pero por la ruta en btt... va ligero de equipaje pero con muchas ganas... Nos despedimos y separamos porque aunque tenemos el mismo final de etapa, la ruta que llevamos es algo o bastante diferente.
La salida de Sigüenza la hago como siempre, por carretera, aun no sopla viento, la mañana esta tranquila y en el cielo las nubes me dicen que va a ser un buen dia...alguna mentirijilla me dijeron, pero vaya, sin importancia. El primer pueblo por el que paso es barbatona, con un hermoso chopo que seguro que está ahi para dar los buenos dias al viajero. Con frecuencia veo la señal de bicho suelto saltador de carreteras y alta cornamenta, pero lo cierto es q veo pocos animalillos de esa especia cruzando la carretera,son menos grandotes pero rapidos a más no poder, no me dara tiempo nunca a pillarlos.
Campos recién arados y sembrados recién sesgados... me encanta como peinan los agricultores estos rasurados campos. En Alcolea del Pinar paro a recoger agua de la fuente y a hacerle unas fotos a la Nana en unas jardineras, pero especialmente a tomar un cortadito con leche natural en un bar frente a la caseta de Peones Camineros,con un rotulo desdibujado pero en el que todavia puedo imaginar los sueños y sufrimientos de aquellos operarios de lo publico...
En la ruta el cielo sigue pintado en nubes grisaceas y blancas sobre azul «cielo», tamizan la fuerza solar y los verdes, ocres, tierra, amarillos y grises asfalto mas o menos evejido resaltan con mucha intensidad
En Anguita, pueblo precioso donde los haya, paro a hacerle fotos con flores a la Nana en una «florida» hermita. Allí mismo coincido con otro viajero del camino, pero su montura, aún siendo como la mia, resulta espectacular, va sobre una motaca impresionante, una BMV ahí con sus supermaletones, hablamos un rato y ale, al camino. Veo un cartel co tra el fraking y unas curiosas formaciones rocosas... me esta gustando mucho esta ruta... pero hace viento he vuelto a rodar por la naciona... Molina de Aragón 43 kilómetros... cómo puede ser si en mi carta de ruta aún me quedan cuatro o cinco o seis etapas para llegar.... aprovecho una parada de autobus bendita para de autobús, para cobijarme del viento unos instantes, mirar mapas y.... viajero de pacotilla que soy, siempre atrapado por la prisa tonta de la meta estoy a un pelo de tirar todo recto y hoy mismo llegar a Molina de Aragón... un hachazo brutal de kilómetros y jornadas a mi viaje... pero... reflexiono... me acuerdo de Itaca... y me olvido de llegar y retengo lo importante, que es «ir».
Así las cosas, haciendome el valiente curtidi en mil viajes, que tiro para Luzón t a seguir la ruta oficial del Consorcio, cueste lo que cueste y llegue hasta donde llegue.
Luzón, curioso pueblo (en lo alto como casi todos) del que prácticamente paso de largo... pero no sin hacerle fotos a la Nana al lado de unos cardos bien hermosos... en esto que veo en lo alto unas figuras, espcialmente la de u a mujer, de bronce y un letrero igualmente en metsl i gigantesco que pone «combustión»... no se a cuento de qué vendra... ya lo miraremos más tarde en el google.
Seguimos... los sembrados recien segados estan ahora sembrados de montones de perfectas balas de paja amarillas... cómo no hacerle fotos a la Nana en aquel lugar, imposible! Mas colores, mas paisajes verdiocresmarrones.... y llego a Ciruelos del Pinar... pregunto por un bar a un paisano que estaba sacando lustre a su tractor... justo allí mismo, enfrente y con un hermoso cartel... un bar, club de jubilados... entro, una cerveza y un bocadillo de lomo.... aquí no tengo cobertura y el mismo señor del bar se encarga de llamar a la casa rural donde me hospedo esta noche para reservar me una habitacion.... como, charlo un rato con su madre que va y resulta veranean desde hace algunos años en el Grau de Castelló... salgo por una muy, pero q muy empinada cuesta y antes de tomarla empujando la bici (no podia ser de otra manera) veo un pilón fuente con un lavadero... bajo... pero horror está lleno de avispas o de abejas, que no me paré a averiguarlo del pánico que les tengo... y ala a empujar y parriba.... en nada.... molinos de viento.... Maranchon, mi destino de hoy, la Casa Rural El Rincón de la fuente vieja, genial y a un precio imbatible.... al rato llega Kepa, el muchacho vasco que va por el monte con la btt.... charlamos, paseamos, hacemos fotos al pueblo y a los molinos ... Aquí le deben tener devoción a la empresa de electricidad esta... cuyo nombre no digo pero que rima nunca mejor dicho con trola.