Vincent, no te desmoralices. Si supieras lo que hace no mucho me costaba a mí subir cualquier cuesta... me pasaban hasta los niños en skate, y ahora le meto mano a casi todo el mundo. Y eso que tengo casi 53 años, milito en el club de la nueve arrobas, salgo siempre con la bici cargada y soy fumador.
El secreto está en estirar bien las piernas antes y después de cada salida. Yo, al principio, no lo hacía y cada vez que veía una cuesta, me entraban sudores fríos. Luego comprendí la importancia de estirar y llegué a estar más de media hora haciendo ejercicios antes y después de pedalear.
Si no lo haces, los músculos se asfixian y no responden. Y aunque tengas una capacidad pulmonar descomunal, un torrente sanguíneo como el Amazonas y la forma física del Usain Bolt, te pasarán hasta las bicis con ruedines.
Por no mencionar que si tienes los músculos asfixiados y los fuerzas, puedes acabar con unas tendinitis de caballo. Y sé de lo que te hablo, llegué a pasar 10 días aullando de dolor debido a tendinitis en los cuádriceps
Ahora, sin embargo, puedo resoplar como una locomotora Evening Star, pero no hay cuesta que se me resista y en pendientes fuertes y prolongadas, donde antes me arrastraba y pensaba en echar pie a tierra, ahora subo hasta a 20 km/h, dando matarile a todos los cicloruleros vestidos de payaso MiColor que me fulminan en el llano.
De todas formas, es algo que lleva su tiempo. Lo importante es encontrar tu ritmo, el resto irá viniendo poco a poco. No desesperes.
Ánimo tío y dale duro.