Aprender a ir en bici le costó más de una carrera a mi tío. La abandone durante unos años, hasta que volví a descubrirla de Erasmus por Italia, que gozada ir a comprar, salir de marcha, ir a las prácticas... sobre ruedas. Desde mi vuelta ya no he vuelto a disfrutar tanto de otro medio de transporte que no sea la bicicleta o el tren.
Hace poco he descubierto el cicloturismo, que práctico siempre que puedo y cuando no, imagino un largo viaje basado en los cientos de sueños reales que por todo el mundo están haciendo realidad los cicloviajeros