Día 7. De vuelta a Sevilla. Allí felicitaré a mi familia por el nuevo año, porque sevillano nací. Aunque mi camino pasaba por la puerta de mi casa no tuve más remedio que visitar Mi puente de Triana, con admiración, pues es el mayor emblema de mi ciudad para mi gusto. Ruedo por el centro de Sevilla y la contemplo como turista, a pesar que he vivido desde siempre allí. Tal vez porque la vida se ve de otro modo montado en una bicicleta.