Tras pasar la tormenta que nos bloqueó en Asilah un dÃa entero, parece que podemos pedalear sin mojarnos demasiado.
La carretera discurre por campos, no va paralela a la costa. El campo está muy mojado aunque no llueve, curiosamente nos pilla un chaparrón a escasos metros de un puente, en un esprint estamos a salvo jajaja.. menos mal.
El paisaje son campos de cultivo y pocos árboles, casas desperdigadas y alguna que otra población.
Llegando a Larache vemos a lo lejos la tormenta que se acerca muy rápido... no hubo escapatoria, nos mojamos mucho por culpa del fuerte aire que hacÃa. Gracias a la lluvia no pudimos ver el delta del rio y la gran playa que posee.
En Larache perderse sin problemas por el zoco, no es muy grande. Pasear por el paseo marÃtimo y adentraros en la cuidad. Aunque está deteriorada, no deja de ser interesante.
Nos alojamos en una de las pensiones que hay en las calles perpendiculares a la plaza principal.