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Andalsnes-Eidsdal

  • 8 de August de 2013
  • 60 kms

Hoy toca subir Trollstigen, la "escalera de los trolls". La carretera se va internando en el valle, en suave subida. Es el típico valle en U de origen glaciar, muy ancho y flanqueado por lisas paredes de roca oscura, que chorrea agua por todas partes. Son unos 20 km de subida y unos 900 m de desnivel. Lo bueno es que, en estos puertos que ya te esperas, vas mentalizado de que vas a sufrir como un perro, así que luego no suele ser para tanto. Al ir avanzando valle arriba se empiezan a ver las famosas curvas de la carretera, trepando por la escarpada pared del fondo del valle. Hay bastante tráfico de coches, pero la carretara no es tan estrecha como pensábamos y se sube bastante bien. Así que, a ritmo y haciendo la cuenta atrás, van pasando las 11 curvas cerradas y nos encontramos arriba, sufriendo mucho menos de lo esperado. Somos los únicos ciclistas subiendo por este lado, aunque nos cruzamos varios que bajan (habrán madrugado más que nosotros, seguro).

Arriba hay unos miradores, pero ni nos acercamos, ya que están totalmente cogidos por la niebla. A partir de la cafetería aún quedan 3 km de subida, y luego una larguísima bajada hasta Valldal, a orillas del Storfjorden. Pensamos que hacerlo en el sentido inverso debe de resultar bastante más pesado, son muchos kms de subida seguidos, aunque sean menos duros en cuanto a pendiente. Pasado Valldal cogemos un ferry a la otra orilla. En Eidsdal, no hay camping abierto, pero acampamos en una zona que debía ser un camping y que ya no estaba en funcionamiento, justo en la orilla del fiordo.

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