- Cogemos la carretera por la costa, mucho más bonita.
- Difícil quitar los pedales. Compramos un rollo de 150 metros de plástico para cerrar las cajas. ¡Genial! Tardamos 35 minutos en desmontar y empaquetar.
- “Uy, qué mareo, ¿no?”, comentario de un azafato tras un vuelo con muchas turbulencias.
- Quedamos atrapadas en Barajas por nuestra vuelta un jueves a las 18 horas. No encontramos una vía urbana por la que pedalear segura. En bus no podemos meterlas y en metro tampoco hasta las 21.
- Regreso con un pedal roto y los cambios chafaos a pesar de haberlos llevado a arreglar dos semanas antes.