Salimos de Orisaare y nos dirigimos hacia Muhu, la más pequeña de las tres grandes islas estonias. El paso entre ambas islas, a diferencia de los anteriores, no se hace por ferry sino a través de un puente de unos 500 metros. Nada más cruzarlo, en Nautse, visitamos una curiosa granja, entre cuyos inquilinos encontramos avestruces y canguros. Continuamos nuestro recorrido por la isla, a través de algunas pistas de tierra y con la mayor dificultad tecnica de todo el viaje: un tramo empedrado a través del bosque de unos 8 kms. en el que varias veces tuvimos que echar pie a tierra y empujar las bicicletas, y que nos llevo en torno a una hora cubrir. Nada más salir del interminable tramo, llegamos a la terminal de ferry que nos llevó de nuevo a la Estonia “continental”. Tomamos el ferry hacia Virtsu (25 min, 3 euros por persona), compramos algo para comer,y damos por terminada la primera fase del viaje en bici.
Desde Virtsu, tomamos un autobús que en hora y media nos lleva Parnu, Parnu (40mil habitantes) es considerada la capital del verano en Estonia. Cuenta con un largo paseo maritimo y una zona de puerto ideal para pasear en bicicleta (ya con las alforjas en el hotel), además de numerosos lugares para cenar. En Parnu, pasamos la tarde y la mañana del dia siguiente. A mediodia, tomamos un autobús con destino a Riga, donde pasaremos los dos siguientes dias.