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Panamericana: Baja California

Por Alicia Urrea

Este artículo forma parte del proyecto Panamericana, una guía cooperativa con información de y para ciclistas que quieran hacer la ruta por las tres Américas. Puedes encontrar el índice completo de la serie e información sobre cómo participar aquí.

Por José Díaz de Tuesta

Cuando Oliver Sacks* dejaba su clínica en UCLA para descansar el fin de semana, se subía en su BMW R60 y tumbado sobre el depósito descendía de un tirón desde Los Ángeles hasta San Diego, Rosarito y Ensenada. Por carreteras casi vacías a comienzos de 1963. El eco de aquellas expediciones solitarias y felices aún perdura en las viejas carreteras de California.

Desierto de los Cirios

Desierto de los Cirios

Desde los Estados Unidos, alcanzar la frontera de Tijuana y adentrarse en la península de Baja California es uno de los caminos para iniciar la travesía de México para quienes ruedan por las Américas. Es además un extenso paisaje desértico y de costas vírgenes y pacíficas.

La Península de Baja California tiene 143.000 km cuadrados, 1.250 km de longitud y 245 de anchura. Se adentra en el Pacífico formando un Golfo entre su costa oriental y los estados de Sonora y Sinaloa.

Los estados de Baja California y Baja California Sur son recorridos por una carretera principal de norte a sur, la MEX 1, aunque entre Ensenada y Chapala hay una alternativa acercándose al Golfo que merece la pena ser explorada. A excepción de un pequeño tramo de terracería, el resto es de buen asfalto aunque normalmente sin márgenes o arcenes.

El tramo preliminar en USA es casi llano y continúa así hasta cerca de Ensenada. Le sigue una meseta de 400 metros hasta el Golfo y un largo descenso costero al sur hasta atravesar de nuevo hacia el Pacífico y las salinas de Guerrero Negro. De nuevo hacia el Golfo hay algunas subidas y una brusca caída hasta Santa Rosalía. En el tramo final se sigue la costa del Golfo hacia el sur y se asciende a una meseta, equidistante de los mares, larga y solitaria, que conduce al final de la travesía en La Paz, a orillas del Golfo.

*Oliver Sacks. En Movimiento. Anagrama.

El recorrido

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La travesía desde Los Ángeles hasta la capital del sur de Baja California, La Paz, es de poco más de 1.900 km, y comprende un preliminar en USA y tres tramos en México bien diferenciados (de norte a sur)

  1. Desde Los Ángeles a Tijuana (322 kms).Carretera casi en desuso pegada a la costa del Pacífico siguiendo el viejo Camino Real.
  2. Desde Tijuana a Chapala (597 kms) Carretera de asfalto con menos tráfico a partir de Ensenada y casi 50 km de terracería finales.
  3. Desde Chapala a El Coyote-Mulegé (498 kms) Carretera de buen asfalto y poco tráfico.
  4. Desde El Coyote a La Paz (486 kms) Buen asfalto con muy poco tráfico.

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¿En qué época realizar la aventura?

La mejor época para la travesía coincide con el otoño, entre octubre y diciembre. Las temperaturas son favorables y hay ausencia completa de precipitaciones. En esta sesión se dan temperaturas perfectas para pedalear, con matinales sobre los 8/10 grados a primera hora y máximas de unos 27/29 en cuanto avanza la mañana. Las noches son moderadamente frescas sin frío. Los cielos despejados casi siempre con escasos días de nublados claros. En el verano las temperaturas son muy altas y casi insoportables al atravesar los desiertos.

Bahía Coyote

Bahía Coyote

No hay vientos que dificulten seriamente el pedaleo. Podrían destacarse, si acaso, algunos vientos al caer la tarde de norte hacia el sur en el norte de la costa del Golfo de California.

El vestuario para la ocasión se corresponde con el propio del verano en Europa, sin necesidad de prendas ni complementos de abrigo para ir en bicicleta y un saco intermedio y un abrigo ligero para las noches.

Dependiendo del ritmo se puede estimar que el recorrido completo se puede hacer en 20 a 24 etapas y que con los descansos y visitas será necesario un mes.

La Giganta Lig

La Giganta Lig

¿Cómo llegar a Baja California?

Si se viene recorriendo la Panamericana desde el sur, es buena alternativa ascender a los Estados Unidos por esta ruta tomando un ferry hasta La Paz en los puertos de Mazatlán o Topolobampo, en lugar de ascender por los inhóspitos estados de Sinaloa y Sonora.

Si se viene desde Oregon en ruta desde el norte, después de San Francisco, Los Ángeles y San Diego se entra en México por la frontera de Tijuana.

Se puede acceder desde Europa u otras procedencias a través del aeropuerto de Los Ángeles que tiene un gran número de conexiones y algunas líneas low cost desde Europa como Norwegian. Tijuana también tiene conexión aeroportuaria pero, normalmente, hay que acceder a Ciudad de México y conectar allí con otro vuelo.

Hay autobuses a Tijuana desde muchas ciudades de México, incluso desde la remota San Cristobal de las Casas.

Consideraciones para el viaje

La carretera es de fácil navegación y no da ningún problema. Baja California está poco poblada, así que de ordinario hay una sola carretera, con buen asfalto aunque sin arcenes, salvo excepción. La travesía discurre hacia el sur zigzagueando de la costa del Pacífico a la del Golfo. No hay subidas y bajadas de importancia. Las altitudes a superar oscilan entre los más habituales 20/200 metros y algunas estribaciones serranas de 400 metros.

Coche abandonado en la playa Hawai

Coche abandonado en la playa Hawai

El tráfico es de baja intensidad, a excepción del tramo entre Tijuana y Rosarito y las velocidades de los vehículos son normalmente moderadas. Son más impactantes los grandes camiones articulados que, no obstante, tienen un comportamiento adecuado e intentan causar las mínimas molestias a los ciclistas.

La alimentación es fácil en México. Aunque los pueblos están algo distantes unos de otros todos tienen buenas condiciones para reponer víveres y hay lugares adicionales en la carretera con un servicio suficiente. Además, en todas partes hacen comidas sanas y a buen precio con horarios de atención amplios. No es necesario llevar más provisión encima que la necesaria para salvar cada etapa salvo cuando no puede alcanzarse ningún pueblo. No obstante, hay que tener en cuenta que los tacos y otras comidas mejicanas dan una provisión escasa de energía y hay que completar con arroz o pasta para una reposición suficiente de fuerzas. No es difícil obtener agua en ruta y si se viaja en invierno, las moderadas temperaturas evitan que sea necesario cargar con grandes y pesadas cantidades. En esta época del año, con 3 litros puede bastar para adentrarse en la etapa.

Cactus gigante en Baja

Cactus gigante en Baja

Para dormir hay opciones suficientes por toda la península: pequeños hoteles que aceptan rebajas sobre los 10 dólares; hoteles que permiten acampar a los ciclistas por el precio de una ducha; diez o más anfitriones operativos, de las redes couchsurfing y warmshowers, y toda clase de lugares para acampar en buenas condiciones de seguridad y comodidad en desiertos y playas. También facilitan un lugar para plantar la tienda en los servicios públicos dentro de las poblaciones como presidencia o delegación (ayuntamiento), policía, bomberos, escuelas y parroquias.

La frontera de Tijuana, en sentido norte-sur, no presenta ninguna dificultad aunque recientemente (desde agosto 2015) cobran en México una tasa por la expedición del visado por seis meses que se paga en la propia frontera, en dólares o pesos, y cuyo recibo es muy importante conservar hasta la salida del país o pueden intentar cobrar la tasa de nuevo en la salida.

Hay cajeros en todas las localidades de cierta importancia (Tijuana, Rosarito, Ensenada, san Felipe, Guerrero Negro, Santa Rosalía, Loreto, Ciudad Insurgentes y La Paz) La tarjeta Master Card es aceptada en todos los ATM. En toda la península son bien aceptados los dólares norteamericanos para pagar cualquier servicio o compa.

No hay peligros para la salud específicos en la zona ni se requiere una vacuna o protección especial. No hay mosquitos, ni perros sueltos, ni otras alimañas más que algunas serpientes tan peligrosas como escasas y huidizas en los desiertos. Como siempre hay que tener especial cuidado con el agua y no resulta costoso asegurar su buen estado con el agua embotellada o la que nos cedan para reponer nuestras botellas de los habituales bidones de 20 litros.

El peligro más relevante está en el asfalto y en los adelantamientos. Los tramos con arcén o margen son muy escasos y la anchura de las calzadas es cicatera. Los bordes de la carretera tienen el peligro añadido de que no están compactados por lo que hay que vigilar una posible salida que rápidamente se convertiría en caída por el desnivel, las obras mal rematadas de saneamiento o por los escombros y restos de todo tipo. La señalización de las carreteras es buena pero el tráfico es siempre peligroso aunque no denso. No hay tráfico a grandes velocidades y la visibilidad es siempre muy buena. Es imprescindible tener retrovisor y desarrollar una buena estrategia de control del tráfico que se aproxima por detrás, ampliando nuestro espacio en la calzada hasta que se comprueba que el vehículo que pretende adelantar ha abandonado el mismo carril por el que estamos. No es mala idea reforzar nuestra señalización con dos banderas y material de alta visibilidad.

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Hay posibilidad de encontrar repuestos para la bicicleta y recibir una reparación suficiente en todas las ciudades que se citan en las que hay cajeros. Por otro lado, la cercanía con Estados Unidos y los buenos servicios de mensajería aseguran la reposición de cualquier material que sea necesario para seguir.

Para la preparación de este tramo de la Panamericana resulta útil elaborar unas hojas de ruta propias definiendo las etapas e incorporando la información de otros viajeros que han publicado su viaje en Rodadas y en otras webs. Las rutas con mapas y perfiles que ofrece wikiloc, el estudio de la opción relieve en los mapas on line de google y, sobretodo, la información que proporciona sobre lo que nos espera cada ciclista (escasos) con el que nos cruzamos en ruta.

Alternativa por camino

[Añadido de A&A] Una pareja de ciclistas intrépidos, formada por la ganadora de la TransAm Race de 2016, Lael Wilcox, y el autor del blog Gypsy by Trade, Nicholas Carman, se encuentra en este momento desarrollando una nueva ruta que conecta diferentes senderos y pistas de tierra para atravesar toda la península de Baja California sin tocar carretera. La ruta, de aproximadamente 2000 millas de longitud (unos 4000 kilómetros), está en fase de documentación (elaboración de cartografía, guías, etc.) pero el proyecto promete. Puedes seguirlo y descargar el track GPS en su web.

Epílogo

Las notas que aporto se basan en un viaje realizado en noviembre y diciembre de 2015, sin dificultades y muy gratificante desde el primer momento. Los paisajes terrestres y marinos, la intensidad de los desiertos, el silencio en una gran extensión de territorio poco poblado y sin tráfico molesto producen una gran sensación de armonía y de paz. Es cierto, como dice cada ciclista que ha recorrido México, que aquí la hospitalidad alcanza el mayor grado entre todos los lugares del centro y el sur de América. Es también una prueba para la soledad en la que rueda a diario el ciclista. Los pueblos son escasos y poco poblados, hay muy pocos cicloviajeros en la ruta y se van a pasar muchos días sin más comunicación que la que se establezca con interior y la que se lance sin respuesta al expresivo paisaje que nos rodea.

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José Diaz de TuestaJosé Diaz de Tuesta. A los pocos días de alcanzar la jubilación, José se embarcó en solitario en su primera travesía por la Américas, desde Ushuaia a Puerto Montt, en Chile. Poco más de seis meses después de regresar de América del sur se plantó el Los Ángeles para rodar Baja California y seguir luego hasta Cancún por el continente. Sus aventuras se pueden leer completas, con hojas de ruta y otros datos en su blog 400días

Este artículo fue publicado el 23/agosto/2016. Última actualización: 7/agosto/2020 dentro de la categoría Guías de viaje en Rodadas.net, una página web sobre cicloturismo y viajes en bicicleta mantenida por Álvaro Martín y Alicia Urrea.

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Comentarios Hay comentarios de 4 intrépidos

  1. Juan Carlos Morales dice:

    Estoy jubilado y espero poder animarme hacer el viaje por la Panamericana.. quizás también desde los ángeles o Tijuana hasta Argentina….. Mi país… José felicitaciones…. Me gustaría hacerte preguntas….pues surgen muchos pensamientos…. ME FALTA EL ÚLTIMO EMPUJÓN….. gracias….

  2. Alma dice:

    Me guardo esta ruta, tiene una pinta espectacular 🙂

  3. Wild Rover dice:

    Qué pasada de ruta. Espero algún día poder hacer algo parecido.

  4. Hiking7trails dice:

    No conocía esta ruta, muy interesante.