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Episodio II

Por Avo y Ali

Hoy estamos en Delft, una ciudad preciosa, como de cuento, muy cerquita de La Haya. En lo poco que llevamos aquí, hemos descubierto ya varias cosas importantes. Primero, nunca hagas caso de las previsiones metereológicas. Se suponía que hoy iban a caer chuzos de punta, y luce un sol, que no es radíante, pero no esta nada mal. Por otro lado, nunca le pidas a un holandés que te diga como llegar a ningún sitio: ¡¡oblígales a que te acompañen!! Por experiencia, de verdad.

Después de estas consideraciones previas, aquí va un repaso de los últimos días. Ayer fue una de esas jornadas para olvidar. Nos levantamos pletóricos de energía, y nos fuimos a desayunar. Nos quedamos con un precioso recuerdo del albergue, en forma de tenedor y cuchillo, y seguimos nuestra ruta tan felices como las perdices. El camino era precioso, siguiendo la costa por una especie de bosquecillo. Nuestros culos se quejaban poco de la dura sesión del día anterior, así que pedaleábamos con ganas. Después de cruzar el primer pueblecillo la cosa cambió: de pronto nos encontramos con que ¡¡hay cuestas en Holanda!! Es cierto que no son los Alpes, pero en este país sopla un viento endemoniado que no te deja avanzar. Cuando llevábamos cosa de 30 kilómetros, estábamos ya derrengados.

Pedaleando pedaleando llegamos a una pequeña fuentecilla. Mientras Avo rellenaba nuestras reservas de agua, yo decidí piñarme con un poco de estilo. Nada grave, solo un pequeño moretón que adorna ahora mi piernecilla izquierda 😉 Ya estábamos cerca de la Haya, así que seguimos del tirón, y a eso de las 2 ya estábamos en la ciudad. Comimos unos bocadillos, y descansamos un rato. Después fuimos en busca de la ANWM (o algo así). Se trata de una asociación que se supone equivale a la RACE, y está asociada con la Asociación de ciclistas, y tiene unos mapas excelentes, especiales para velocípedos como nosotros. Pero resultó que al final los mapas no eran tan excelentes, porque son de una escala muy pequeña, así que para cada día necesitaríamos tres. Decidimos comprar solo uno que tiene los PF, que son unas rutas que se supone son especialmente bonitas para recorrer en bici.

Estamos impresionados con los holandeses. Para empezar, aquí todo el mundo habla ingles, incluso los ancianitos más ancianitos, y en segundo lugar, todo el mundo va en bici a todas partes. Hemos visto de todo, desde altos ejecutivos, a señores mayores con sus nietos en los porta-niños, gente que sale de marcha en bici, y otros que se van a hacer la compra. Gente de todo tipo. Y lo peor es como conducen: es increíblemente estresante ir en bici por la ciudad.

Después de salir de la ANWM, nos dimos cuenta de que se nos había hecho demasiado tarde para llegar a Delft a dormir como pensábamos en un principio, así que decidimos quedarnos en el Albergue de la Haya (den Haag). Mapa en ristre nos pusimos a buscarlo. Estábamos consultando en un semáforo cuando se nos acercó un tipo muy amable y se ofreció a guiarnos. Resultaba que lo habían cambiado de sitio, para ponerlo cerca del centro, en pleno barrio rojo.

Un periplo suicida por la ciudad siguiendo al hombre, que llevaba a su niño en una rudimentaria sillita en la parte trasera de la bici, sólo para descubrir que ya estaba completo. De camino en busca de la oficina de turismo: el desastre. Alicia, un carril de tranvia: resultado BICI 2-ALICIA 0

En fin… que La Haya no nos gusto demasiado, así que decidimos salir de allí lo más rápido posible, e irnos a dormir al camping de Delft. Creo que es lo mejor que hemos hecho en todo el viaje. Este sitio es una pasada. Una ciudad de cuento, con canales llenos de nenúfares, casitas de tejados puntiagudos pintados de colores. Delft es una especie de Ámsterdam pero sus casas son mucho más pequeñas y la ciudad está llena de calma. El camping es muy chulo, y para recuperarnos del stress de ayer, hemos decidido quedarnos aquí otro día más. Mañana nos vamos a Dordretch, a ver si podemos hacer algo de piragua en una zona muy chula de marismas que nos han comentado

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Este artículo fue publicado el 9/julio/2002. Última actualización: 7/agosto/2020 dentro de la categoría 2002 - Holanda en Rodadas.net, una página web sobre cicloturismo y viajes en bicicleta mantenida por Álvaro Martín y Alicia Urrea.

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Comentarios Un valiente ha comentado

  1. Raúl Téllez dice:

    He vijado por Holanda y es maravilloso. Estar en Amsterdam es increíble pues al ciclista se le respeta a tal punto que los peatones allí están obligados a darles paso. Cerca a la estación de trenes en el centro de la ciudad, hay un parqueadero de bicis de tres niveles en donde cabrán al menos unas cinco mil; entonces como existe este parqueo dejar la bici en la calle atada a un poste no es seguro pues la misma policía está autorizada a romper los candados y llevarse las bicicletas. Uno de los paseos más agradables es ir a Marken, no es muy lejos pero el carril bici va por en medio del mar pues es tierra que los holandeses han recobrado del mar; eso sí hay bastante viento pero es muy bueno llegar a éste pueblo de pescadores y encontrar todas sus casas de madera, casi todas pintadas de verde y con sus grandes solares. En Marken es bueno visitar las tiendas de artesanías donde se encontrarán tejidos a mano, trajes típicos, bufandas y los zapatos suecos, además de sus comidas tradicionales. Otro sitio para ir desde Amsterdam es Volandem en donde lo más particular es ver los arreglos florales y de porcelanas en cada casa del lugar. También visitar el parque central de la ciudad de Amsterdam con sus laguitos y toda su fauna y flora es muy hermoso. Visitar los museos en Amsterdam, las joyerías, los sex-shops con todos los afrodisíacos e implementos es algo para no perderlo y el Barrio Rojo también resulta divertido. En fin viajar por Holanda es una delicia, quizás se pueda cansar de ver tanta agua; las casas hacia las afueras yendo hacia Anterpwen están dotadas de un garaje para el auto pero también cuentan con su embarcadero. Creo que mi próximo viaje será de Amsterdam hacia Bremen (Alemania), Hamburgo, Berlín y otras ciudades. Alemania es igualmente estupenda para viajar en bicicleta. A quien lea mi comentario me gustaría saber si conoce la logística para ir de Amsterdam hacia Berlín.