¡¡Buenos días compañer@s!!
Supongo que puedo considerarme ciclista urbano, teniendo en cuenta que todos los días saco la bici para ir y volver de trabajar y estudiar (ahora estoy de vacas estudiantiles, eso sí, jejeje). Quiero contaros, así brevemente, que ayer tuve mi primer accidente circulando desde hace unos años que en ello estoy. Iba bajando por la zona de Pirámides a Marqués de Vadillo y pillé uno de esos baches profundos que angustian solo verlos acercarse a la rueda... creo recordar que frené o intenté hacerlo, y ya no sé si fue por la propia frenada o simplemente el propio golpe, que di la vuelta y caí redondo al asfalto. Por suerte solo han sido magulladuras en los miembros y la cara, unas más graves que otras, en el intervalo de un pequeño rasponazo en el brazo izquierdo a un hematoma bien gordo en el hombro derecho. No hay roturas ni contusiones realmente graves. Y menos mal que llevaba el casco, porque de otro modo hubiera sido algo más que una fuerte conmoción lo que me ha tenido con verdaderas molestias y algún mareo.
En este momento no recuerdo ni lo que iba pensando justo antes del accidente, ni cómo fue realmente, tan solo recuerdo la imagen del bache a menos de un metro y mi pensamiento "aquí la cagaste...". Lo siguiente que recuerdo es que me levanté mareado y dolorido, recogí la bici como pude y la llevé al arcén. No perdí el conocimiento pero es lo más cerca que he estado de tener pajaritos revoloteando alrededor de mi cabeza, como si fuera un dibujo animado. He de decir que los conductores fueron muy amables conmigo, un turismo que iba delante mío paró a ofrecerme ayuda y el autobús que tenía detrás hizo lo mismo (a pesar de los vehículos que venían detrás) hasta que comprobó que me encontraba más o menos bien y podía seguir por mi propio pie, asegurándose de que no había mayor peligro para mí. De ahí fui derechito a casa y al centro médico, muy atentas tanto la doctora como la enfermera. Mi más sincero agradecimiento a los conductores que me prestaron su ayuda y al personal sanitario que me atendió.
Sin duda debía andar muy despistado, pensando en mis historias, y me confié sabiendo que por esa zona circulaba frecuentemente. No es la primera vez que cojo ese tipo de baches, y hasta ahora siempre los había sorteado sin peligro de una u otra manera, lo que nunca había hecho es frenar justo en ese fatídico momento... hasta ayer.
Y después de todo este tochaco, solo quiero anunciaros que voy a recuperarme, dejaré la bicicleta aparcada unos días para hacerme un seguimiento personal por si los mareos, dolor cervical o cualquier otro síntoma me previnieran de una placa de urgencia (que por ahora no es necesaria), y la próxima semana volveré a circular con ella. Creo que amo circular en bicicleta. Habida cuenta de lo que me ha ocurrido, intentaré mantenerme con la atención y la sangre fría al cien por cien; es cierto que a veces nos podemos jugar la vida cuando menos lo esperamos, y no siempre va a ser un vehículo el que nos tienda la emboscada.
Por favor, a todos los ciclistas urbanos (o no) que me lean, nunca perdáis la templanza ni os confiéis porque en cualquier momento puede suceder alguna (esperemos, pequeña) desgracia. Y sobre todo, sed más diestros que yo cuando os veáis en una situación similar.
Un abrazo a tod@s (he puesto como etiquetas "seguridad vial" y "lesiones", por tomar las etiquetas más populares, así que si debo corregirlo avisadme).