De El Masnou a El Cuc
Esta historia empezó hace casi
dos meses, en aquel momento, en el momento de salir de viaje, fui al encuentro
de un grupo de ciclistas que frecuentan el foro del club de ciclismo del pueblo
donde resido: Las Nenazas.
O tal vez podría decir que empezó
hace una semana en la que una salida con un grupo de amigos me llevó a La Miranda, en Tarragona y
allí uno de ellos me hablo de El Cuc, de Ana, de una pastelería…
En el primero de los casos una
forera, cuando le dije que al volver del viaje intentaría salir más a menudo
con el grupo me respondió: si, lo dices pero luego no lo haces…
Tenía razón, de hecho la tiene,
no era la primera vez que lo decía, no ha sido la primera vez que no lo he
hecho.
En el segundo de los casos, es
cierto que Candido fue a El Cuc y le hice un comentario similar, cuando vuelva
del viaje iré a verlo… hace una semana me hablaba del Cuc.
El Masnou y El Cuc tienen puntos
comunes y muy lejanos puesto que los dos son lugares, en los dos hay personas
que viven, en los dos hay hoteles muy interesantes… pero al tiempo son muy
lejanos puesto que uno tiene mar y el otro está en la montaña, pero si algo es
absolutamente dispar es que uno es una población en la que hay árboles y el
otro es un árbol en el que no hay población.
Os contaré una historia de un árbol
que gracias a que casualmente se quemó, sobrevive a los vientos… todos los
castaños al igual que algunos pinos tienden a caer por el viento, pero nuestro
castaño, El Cuc, con mas de mil años sobrevive al tiempo…
Hueco por dentro, en el llegó a
vivir alguna persona que necesitó hacerlo circunstancialmente.
No es un árbol cualquiera, es el
castaño más importante de Cataluña, de España y posiblemente de Europa.
Según me ha explicado la hija de
su dueño, tiene más de mil años y se salvó porque casualmente se incendió por
un fuego que hicieron unos pastores que prendió la soca y a través de esta su
interior…
El árbol estuvo ardiendo tres
días abriendo primero un agujero por la parte inferior del tronco, no fue hasta
que abrió el agujero superior que lo pudieron apagar…
Sabe?, me ha dicho la buena mujer,
los castaños se pudren por dentro y por eso terminan cayendo, el fuego curó la
pudrición y eso es lo que ha permitido que lo podamos ver hoy en día….
Me ha enseñado una foto en la que
se ve otro castaño enorme caído junto al nuestro, habían dos, se salvó el que
se quemo, la fecha de la foto: 1935
Las historias también tienen su
parte negativa, tal vez me anime a contarla al final del relato.
Pero empecemos por el principio…
En la noche ha sonado el
despertador y tras apagar su ruido, me
he levantado a mirar el cielo, que apenas se veía… he mirado el suelo de la
calle: seco
Me he puesto en marcha.
Conforme me preparaba se iba
haciendo lentamente la luz de la mañana en el cielo, he salido a tomar un café
acompañado de la bici y demás bártulos para ir a ver algo mucho más importante
de lo que en esos momentos imaginaba, ni siquiera pronunciaba bien su nombre…
le llamaba El Cucut
En las cuestas de Garraf me ha
sorprendido el sol que por el horizonte me ha brindado un espectáculo difícil
de olvidar, en un mirador apostado en el muro disparo sin cesar mi cámara para
inmortalizar esos momentos al tiempo que intento no molestar…
La llegada a El Masnou es una
sucesión de km. en el tiempo, giro a la izquierda en un cruce de la N-II que indica Alella y
aparco en lo que, enterrada, se que es una riera.
Me acerco a un bar a tomar algo y
me asaltan con una pregunta.
-Cuantos llevas.?
-Miro al tiempo que respondo;
trescientos metros, los que separan el aparcamiento del bar y me río. El
interlocutor responde con certeza.
-Y cuantos piensas hacer?
-Ochenta más o menos, voy al
Montseny
-Desde aquí?
-Si, subiré esa montañita, me
acercaré a Cardedeu y desde allí iré a Canoves
Cerca de Canoves dentro del
parque natural del Montseny está El Cuc
En ligera subida, una población
que no quiere perder su pasado vinícola está cerrada, es fiesta, no obstante
veo no solo locales de ventas de vinos, también un mercadillo y el letrero de
su consejo regulador
Subo disciplinadamente hasta Can
Jonc, restaurante que no me es ajeno donde se celebran bodas, es en un lugar
con vistas excepcionales aunque hoy no era el día puesto que chispeaba en esos
momentos…
Mas allá corono y me dejo caer
por el otro lado de la montaña, el llano que viene a continuación de Vilanova
del Valles vuelve a querer subir en La
Roca del Valles para llegar finalmente a Cardedeu, un pueblo
que engaña puesto que nada tiene que ver su fachada a la carretera con lo que
hay tras ella…
Tras Canoves está el embalse de
Valfornes bastante vacío, como los ríos que he ido atravesando que salvo la
riera en Cardedeu estaban más bien secos, falta agua…
Tras pasar por una masía
reconvertida en hotelazo: Can Cuch, llegas a un cruce en el que si giras a la
derecha llegas a la casa del bosque donde he comido y he podido preguntar y escuchar…
Si por el contrario vas por la
izquierda, verás algo inaudito y sorprendente: El Castaño más importante, el
Castaño Grande, el castaño del Cuc, la propiedad del que toma coloquialmente el
nombre.
En las fotos veréis esa
maravilla.
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