Algunos de vosotros tal vez recordéis que hace unos días hice mi aparición en este foro contandoos una de pena. Que mi bici se había 'escogorciao' tras ser sometida a una mejora (upgrading o apgreidin para algunos) que consistió en la instalación de un rotor sin punto muerto. (Gracias a todos por vuestra paciencia y vuestro apoyo y comprensión).
De hecho, en sucesivos mensajes os he consultado sobre la bici que debía comprar para sustituir a la Orbea Elorrio que hasta ese momento tan buenos servicios me había prestado, pero que, de toda evidencia, había pasado a mejor vida. (Gracias a todos, de nuevo, por vuestros valiosos consejos) Daba por supuesto que en la tienda iban a darme largas y a dejarme compuesto y sin bici.
Pues he de reconocer que me equivoqué. El martes les llevé el pecio que un día fue mi apreciada 'flaca' y les dije que quería una solución, porque entre pitos (la 'burra') y flautas (rotor, transportín, pedales automáticos, zapatillas, guantes, luces, etcétera) me había gastado unos 1.500 napos y no tenía nada.
Esta tarde me han llamado para decirme que me sustituirán el cuadro por otro de Conor de gama más alta que el mío, que me darán un rotor nuevo y que, ¡sorpresa!, todo estará listo para final de esta semana. Y sin tener que aflojar la mosca.
Quisiera haceros partícipes de mi inmensa alegría, pero, sobre todo, daros de nuevo las gracias por el calor humano que he sentido estos días tras entrar como un vendaval en vuestras vidas. La verdad es que gente como vosotros me hace recobrar el orgullo de pertenecer al género humano.
Y no es coña.
PD. No he bebido.
PD de la PD. Si pensáis que esto es una despedida y que voy a desaparecer como llegué, estáis muy equivocados, majetes. Esto sólo ha sido la PRIMERA PARTE DE LA LATA. Música, maestro...