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Ruta de la seda

Hacia la mítica Samarcanda atravesando el Este de Europa

  • 2 meses y 3 días 10 de March de 2007 - 13 de May de 2007
  • 4210 Kms
  • medio
  • mayoritariamente carretera
  • Uzbekistán Italia Eslovenia Croacia Serbia Rumanía Ucrania Rusia Kazajstán Ciudad del Vaticano

La ruta

De Barcelona a Italia en ferry. Después algunos tramos en tren en Italia, Eslovenia, Rumanía y Kazajstán. Un tramo en bus en Rusia (¡se me agotaba el visado!). Regreso Tashkent-Roma en avión.

La parte de la ruta que más te ha gustado

Eslovenia, el valle del Sava. El Derdap-Portile de Fer en el Danubio, entre Serbia y Rumania. Los dos con hermosos paisajes de montaña y carreteras tranquilas (salvo los túneles del Derdap). También el delta del Danubio, entre Rumania y Ucrania, decenas de kilómetros de pedaleo tranquilo por zonas húmedas vírgenes rebosantes de aves acuáticas.

El primer día en la Depresión del Caspio, una enorme alegría al ver los primeros camellos.

Los bordes del desierto en Kazajstán y Uzbekistán. El terreno ondulado cubierto de hierba cerca de Symkent, pura estepa.

También me resultó muy interesante y emotivo el ir cruzando algunos de los mayores ríos de Europa: Danubio, Dniéster, Dniéper, Bug, Don, Volga, Ural…

Y, por supuesto, el día que llegué a Samarcanda…

El pelotón

En este viaje íbamos... 1 persona. Yo sólo, Carlos, pintor

Las bicis y el equipo

  • Tipo de bici: Monty Scenic 408 (una btt muy barata y sencilla de unos 7 años). La tengo modificada ya hace tiempo para rodar por ciudad y carretera: portaequipajes, guardabarros, doble portabidón. Antes de cada viaje largo cambio ruedas completas, platos, bielas y piñones, cadena y pedalier. Llantas de doble pared. Cubiertas Schwalbe Marathon de 26 x 1.50 (me gustan finas aunque luego lo sufra cuando hay pistas de barro o arena).
  • Cómo llevabas el equipo: Bolsa de manillar, alforjas traseras, bolsa sobre el transportín
  • En qué plan íbais: Básico
  • ¿Algo que te sobrara o faltara?: Me acordé de un saco de dormir más grueso para las primeras semanas. Una chaqueta de lluvia de mucha mejor calidad. Guantes impermeables.

    De lo que llevaba, no sobró nada. Tenía mis dudas con el filtro y la bolsa de agua pero me fueron muy útiles en algunos momentos (el agua del grifo en los hote

El viaje

El mejor día

Varios.

Entre Ljubliana y Zagreb, un día agradable por carreteritas de montaña.

El primer día en Ucrania, con la sensación de entrar en un mundo distinto.

La entrada a Kazajstán, desierto, primeros camellos, ¡Asia! (aunque se convirtiera en un día duro de 240 km.).

Turkistán, Samarcanda y Bujara. Magníficos monumentos.

Finalmente, no fue un día particular pero el viaje ganó gracias a la calidez de la gente en Kazajstán y Uzbekistán. Algunos magníficos paisajes y monumentos. Además el viaje fue una prueba en la que aprendía que mi capacidad de resistencia es mayor que la pensada, no sólo física, en algunos momentos.

El peor día

Varios también.

De Firenze a Bologna, cruzando el Apenino, me pilló una ola de frío y una ventisca de nieve tremenda.

Entre Gorizia y Ljubliana temporal de bora, el viento de allí, con rachas de 90 a 140 km/h; era dificil incluso caminar, tuve que coger el tren.

El primer día en Rusia, con mucho frío, una lluvia intensa y sin llegar a ninguna parte.

El mayor quebradero de cabeza

El mal tiempo la mayor parte del viaje: ¡Frío, viento y lluvia casi constantes desde Italia hasta Kazajstán! ¡mala suerte!. A partir de Kyzyl Ordá, calor muy intenso y viento seco.

Tráfico muy duro en casi todas las carreteras, sin contemplaciones con el ciclista, peor conforme más al este. Mal asfalto y a veces pésimo asfalto. También la dificultad de conseguir –tanto en Barcelona como por el camino- mapas detallados y exactos de determinadas regiones.

Si repitieras el viaje, ¿qué harías diferente?

No iba lo suficientemente preparado para temperaturas en torno a 0 º C o inferiores. El preguntar a la gente de Ucrania por direcciones, ¡no contestan casi nunca!. Aprendería más ruso antes de partir.

También haría con más tiempo la gestión del visado iraní, finalmente me quedé con las ganas de volver en parte a través de Irán.

Recomendaciones a alguien que vaya a hacer este viaje

Primero que se informe al máximo sobre la realidad de esos países, que lea todo lo que pueda y lo prepare con calma. Son lugares tan distintos entre sí y tan extensos que toda información es poca. También que planifique la obtención de los visados necesarios con meses de antelación si es posible (el ruso, sobre todo).

Es conveniente hacerse a la idea de que buena parte del viaje va a discurrir entre coches y camiones desvencijados, con conductores que van de lo agresivo a lo directamente criminal (tipo Turquía en su peor vertiente, como bien sabéis vosotros). También se ha de asumir que cruzar Ucrania, por ejemplo, así como amplias extensiones de Rusia o Kazajstán, nos obligará a largas semanas de pedaleo por un paisaje monótono y azotado por el viento, con el desgaste mental y físico que puede suponer ésto.

Dependiendo de las fechas el equipo a llevar puede ser muy diferente. No se debe olvidar que la extensión y la intensidad del invierno en determinados lugares tiene bien poco que ver con lo que estamos acostumbrados a disfrutar en el Mediterráneo. Además, el cambio de inverno a verano puede darse de un modo mucho más brusco. En verano los desiertos de Kazajstán y Uzbekistán, e incluso el resto del país, pueden ser insufriblemente tórridos (en el sur de Kazajstán, a mediados-finales de abril, tuve temperaturas de más de 35º C, lo que no está nada mal). Una vez más, informarse bien antes de emprender viaje.

Un detalle importante son los idiomas. Fuera de algunos establecimientos turísticos (Hostels y hoteles de lujo) de Ljubljana o Zagreb en adelante el inglés no sirve para nada. Es conveniente aprender algo de ruso (imprescindible poder leer en alfabeto cirílico) y llevar algún manual de conversación. Un vocabulario básico de serbo-croata y de rumano serán también muy útiles en los respectivos países.

Mejor llevar mapas desde casa. E intentar que sean lo más detallados posible. Hasta Belgrado aún se pueden encontrar algunas buenas librerías dónde completar algunos huecos. A partir de allí más vale ir preparado. Lo poco que se puede encontrar es anticuado, caro y terriblemente inexacto.

Una idea común es que Europa del este es una región barata. Pues bueno, según… La cosa varía mucho: Eslovenia está prácticamente al nivel del resto de la UE, Croacia sólo un poco por debajo (más económico el interior que la costa), en Serbia sí que se nota una diferencia importante pero, aunque comer es barato, el alojamiento en Belgrado no lo es mucho. Los hoteles en Ucrania y Rusia son, en general, escasos, caros y malos, aunque siempre se puede intentar dormir en lúgrubes “komnati”, una especie de pensiones –¡que no siempre se dejan encontrar facilmente! . En general todo resultó algo más caro de lo esperado y parece que los precios siguen subiendo así que…mejor ir con un presupuesto un poco flexible.

Diarios

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