Cuenca a Palencia

Siempre que de pequeño veía pasar a un cicloturista, pensaba que yo tenía que probar. Ya ha pasado mucho desde entonces y por fín el verano pasado tuve la oportunidad y las ganas de hacerlo, así que preparé la bicicleta, me compré un remolque y tras planificar un poco la ruta me lancé a la carretera al amanecer del día 1 de sept. El objetivo del viaje era ir hasta Santiago y Finisterre desde la puerta de mi casa en Cuenca siguiendo en lo posible la “Ruta de la Lana”, que va desde Cuenca a Burgos para enlazar con el “Camino Francés”. Realicé dos desvios,uno para visitar el “Barranco del Rio Dulce” (Guadalajara) y otro para recorrer el “Cañón del Rio Lobos” entre Soria y Burgos. Esto fue sin duda lo mejor del viaje, junto con las solitarias carreteras de Soria.

Lo del “Cañón del Rio Lobos” es algo que recomiendo a todo el que no haya estado.El sitio es precioso a pesar de la gran sequía que reinaba. Mi intención era hacer noche en el Cañón coincidiendo con la luna llena. Se lo expliqué al guarda (muy simpático) que ya me estaba advirtiendo que se me haría de noche dentro del Cañón y me comentó que intentara no montar la tienda después de darme un montón de folletos y explicarme donde estaban las fuentes. Fue una de las noches más alucinantes de mi vida, solo en medio del monte, con la luz de la luna y con el único sonido de todo tipo de animales en sus correrias nocturnas.

Después puse rumbo a Santo Domingo de Silos y desde allí decidí atajar hacia Palencia para pasar unos días de descanso con un amiguete y retrasar en lo posible la marabunta que supone el Camino de Santiago.

Por causas que no vienen a cuento tuve que interrumpir el viaje en Palencia, dejando la segunda parte hasta Fisterra para el verano 2010. Palencia-Sahagún-Santiago-Fisterra ¿alguien se apunta?

Con este miniviaje de 500 km me he hecho una idea de lo que es esto de viajar en bicicleta y he quedado encantado y deseando que llegue el verano para continuar mi periplo por España. Al viajar en bici he saboreado todo mucho más, he asimilado los paisajes de tal modo que al cerrar los ojos lo recuerdo todo en mi mente. Una gozada. Al ir en bici,la gente es mucho más abierta cuando hablas con ellos, no sienten desconfianza y ha sido otra de las cosas positivas del viaje… lo negativo ya lo sabeís todos,los “majaderos” al volante que pasan rozandote y el viento en contra. Ambas cosas son inevitables pero no logran disuadirme de seguir haciendo viajes en bici mientras el cuerpo aguante.

Respecto a lo de “remolque o alforjas”, las ventajas que yo le veo al remolque es la gran agilidad que mantienes en el control de la bici (llegué a olvidar que lo llevaba en las pistas “singletrack” del cañón de Rio Lobos), la comodidád de poder soltarlo para buscar un sitio donde dormir rapidamente, la menor fatiga del cuadro de la bici y de la rueda trasera, mayor capacidad de carga (viajeros solitarios) y luego está ese “look” tan “trotamundos”. Hay que tener cuidado al bajar puertos (yo me caí el primer día por un exceso de confianza) pero con un poco de experiencia y retrasando tu peso en la bici se puede bajar a más de 50 km/h,que ya está bien.

Para los amantes de los datos fueron 490 km (100 por camino y senda) en siete dias con un tiempo total sobre la bici de 38h 30 min y la media total fué de 12,7 km/h. No tube ningún pinchazo y tras la caida del primer dia me quedé sin poder meter los dos piñones pequeños debido a que el carro partió el guiado del cable del cambio trasero. El tercer dia se desoldó una pieza del carro tras una fuerte bajada por una trialera de rocas y que pude soldar al dia siguiente en un taller de tractores.

Si alguien quiere ampliar alguna información estoy a vuestra disposición. Además, ya estoy preparando con mi amigo palentino el siguiente viaje (sept 2011) que consisitirá en recorrer la “Karakorum Highway”(KKH) con algunas variaciones de recorrido y realizandola en sentido China-Pakistán. Agradeceré cualquier información. En fin,un saludo a todos y “pedales”